jueves, 17 de diciembre de 2015

Te escribo sobre mí como si lo merecieras.

No soy tan frágil como parezco, pero me rompo en unas manos que me sepan tocar.
Como se toca un piano que lleva sin sonar años.
No estoy tan triste como parezco, tan solo diagnosticada de nostalgia crónica.
Tampoco soy tan infantil, pero te voy a llorar la muerte de Mufasa hasta que me duerma.
No te voy a pedir que me quieras, tan solo que te quedes.



No soy diferente, no me lo digas dos veces. Soy solo una persona sensible en una guerra constante por la supervivencia emocional.

No me vas a entender si no me conoces y no me vas a conocer hasta entenderme. No me veas medio llena. Ahórrate la decepción. Me vas a preguntar por qué te cuento las pestañas y te voy a mentir.



No me gusta hablar de mí, ni conmigo. Pero escucho canciones tristes porque es una forma de morir despacio, y morir despacio es una forma de saber que aún vives.

No vas a leer la letra pequeña del contrato que son las consecuencias de quererme. Tampoco te las voy a explicar. Si pudiera elegir la banda sonora de mi vida sería tu voz. No volverán este año las oscuras golondrinas de Bécquer. Mi brújula nunca te va a señalar el norte. Pero te puedo hacer el amor y tu lo puedes llamar felicidad. No voy a fingirte las sonrisas tan solo porque tu quieras. Me tomaré la libertad de hacer lo que me de la gana. Incluso daño. No temo a la muerte desde que sé que tiene miedo a que la vean desnuda. De una manera u otra, le compadezco. No soy como piensas que soy. No me gustan los finales alternativos. No me cambies el puto final. Si la película no termina con un beso no la veo. Puedo hacer oídos sordos a palabras necias, pero no puedo olvidar el sonido de las palabras sordas. Puedes creerte que no soy rencorosa, que yo también lo hago. Y también puedes comer caramelos sin pensar que te saldrán caries. Pero no te prometo nada. No estás invitado a mi funeral, pero al menos cómprame flores. Crea algo bonito y observa como se tuerce. Algún día me pediré perdón por autodestruirme. Por escribir esta mierda que te has molestado en leer. No me aconsejes, no te lo tomes como algo personal. Me gusta pegarme las hostias. La última vez que me dijeron que pisara fuerte me cargué todas las baldosas. No te voy a esperar con un cartel con tu nombre en el aeropuerto. Encuéntrame tú. Nunca sé como empezar, aún menos como acabar. Dije que no me gustaban los finales alternativos, no mencioné nada de los abiertos. Me gusta dejarlo todo a la interpretación. Como las miradas. Quítate los zapatos antes de entrar. Bienvenido a mi mente. Hay vistas bonitas si sabes cómo mirar. Disculpa el desorden.

miércoles, 16 de diciembre de 2015

La clase de persona de la que no te vas a enamorar sin odiar tres veces antes.

DEPUTY TIM
Nunca me has dicho cómo era ella.

Bebe un sorbo de la taza de café y apoya las piernas en la barandilla del porche; el rifle sobre sus piernas, descansando.
Ethan bebe un sorbo de la taza y continúa con la mirada perdida.

ETHAN
Ni a ti ni a nadie. Quienes la conocían sabían cómo era.

Los dos comparten el silencio. El cigarrillo que fuma Ethan crepita al quemar el papel, el humo se pierde en el frío del atardecer gris.

ETHAN
Era como arte.
Tira las cenizas del cigarro.

Yo no soy bonita ni lo quiero ser.
ETHAN
Como arte. Nunca me pareció que fuera el tipo de persona de la que piensas que es guapa a la primera, ni que es simpática, ni nada de eso que se piensa normalmente al conocer a alguien. Siempre..Siempre me pareció que era como arte. El arte no es guapo, ni simpático. El arte te hace sentir algo. Algunas personas son así. Antes de discernir si te atraen o te crean repulsión física, hacen que los odies o los quieras. Pero a ella no se le podía odiar. Nadie puede odiar a alguien que pueda sacar a otra persona de un vórtice de oscuridad y caída, autoalimentándose de las pocas fuerzas que le restan

Tim lo mira de reojo. Ethan ni siquiera intenta devolverle la mirada.

ETHAN
Como arte. Esas cosas las hace la música, o las hace un libro. El arte te saca de pozos así.



Javier Vela

Cómo deletrear amor sin que duela.

Quiero escribir algo que no me sepa a restos de ginebra y comida.
Quizá lo haga el día que deje la bebida para ponerme en orden. Para colocarme en un sitio bonito, y después vomitar flores. Quiero no tener que limpiar todo el estropicio luego.
Quiero a alguien que me recuerde que soy alguien. Que me baile el agua y me impida bajar de este tren. Que sea nuestro refugio, aunque no lleve a ninguna parte.
Quiero olvidarme del día en el que estamos. Quiero contar con alguien que me abrace cuando no me soporto y no con los dedos. Quiero hablar de cosas insignificantes. Quiero contarte por qué efímero es una palabra demasiado bonita para existir en un mundo que está enfermo. Quiero enseñarte que si me pinchas también sangro. Quiero que sepas que somos un conjunto de infinitos sucesos que se ha encontrado en un mismo espacio-tiempo pero que a mi me gusta llamarlo destino.
Quiero dibujar un círculo en el que solo quepamos tu y yo. Que me leas entre líneas y yo contarte las de las manos. Que me consumas y guardes mis restos. Y si da tiempo, que lo perdamos.
Quiero, no tener que perderte,
para saber que te he encontrado.


martes, 15 de diciembre de 2015

Día X sin ti:

Tan fácil como decir voy y te olvido,
tan dificil como dar el paso y hacerlo.
He dejado de contar los días sin ti,
y ahora pesan menos.

Aún no te has ido,
Para no acordarme de tus ojos he dejado de mirar al cielo.
Fuiste el regalo que nunca quise desenvolver
porque el envoltorio era bonito.
He tomado mas dosis de realidad de las que recetaban
y sigo colocada.
Me he cortado el pelo porque aún sentía tus dedos quitándome los nudos.
Como los de la garganta que se han convertido en rutina.
Me clavaste el cuchillo en el costado izquierdo y vas y me preguntas si me duele.
Los girasoles que me regalaste han dejado de girar.

Pero sé que te irás,
Tiraré del hilo de mis calcetines para descoserlos.
Para sentir algo de frío en los pies, al menos.
Dejaré de esperar una respuesta coherente como si la vida lo fuera.
Ve a desteñir las bocas que necesites,
yo no me creeré nada que mis ojos no vean.


Me he leído el cuento de caperucita siete veces,
y aún no encuentro la forma de justificar que el lobo fuera tan hijo de puta.

El material de la inocencia es el cristal
No sé si me explico.

Le pusieron de nombre luna nueva
porque quedaba mas bonito que decir que estaba vacía.

Y yo puede que jamás deje de soñar contigo,
y asumiré que hay cosas que el tiempo no se lleva,
que hay agujeros que nunca se llenan,
pero..

siempre podremos inventar nuevas formas de saltar sobre ellos.

miércoles, 2 de diciembre de 2015

·Día 2 sin ti:

Diciembre ha hecho justicia a su estación.

Hoy me he acordado de tus ojos.
Tan distantes que siempre caminaba para poderlos ver de cerca.
Pero me quede enganchada en una enredadera
y me tragó la tierra para que no los viese nunca.
Ahora me pudro con los enemigos de las manzanas,
y los huesos ya no me parecen bonitos.

Hoy me he acordado de tus labios,
tan rosas que podías tintar besos
y pintar con los dedos la utopía
de que haría yo con ellos.

Tambíen me he acordado de tus puntos débiles
y me he reido a carcajadas
y me ha llovido hasta que han dejado de hacer eco
todos los recuerdos, todas las palabras.

Dicen que duelen como balas.
Alas me dabas.

Hoy me he acordado de que quise odiarte
y el corazón dijo: no.
Llevo tres días sin hablarle.

Al quinto me haré la tonta,
le invitaré a una copa y haremos las paces.
Llegaré con nuevas bragas y las dejaré en el suelo
en el mismo sitio donde tu me las quitaste.

Me he quemado las yemas
y he comprobado que duele menos
que no vengas esta noche a arroparme.

Cállame con un beso y dime que mañana será diferente.

Pero sé que no habrá mañana,
porque para entonces
estaré bajo tierra,
donde se pudren las manzanas,
en el lugar donde los huesos..

no son bonitos.

jueves, 11 de junio de 2015

Te escribo lo que nunca leerás, porque no me atrevo a decirte lo que jamás vas a escuchar.
Será mi necesidad de que vuelvas, aunque sea por un rato, vuelve para culparme, vuelve para odiarme, para decirme lo que no me gusta escuchar, pero vuelve antes de que deje la puta jaula abierta.
Los cuervos me están esperando, y creeme que esta vez vienen hambrientos.




Nunca terminé de creer en Dios, pero me ciega una fe parecida.
Si cada uno es dueño y esclavo de sus propios demonios,
los míos deben ser unos hijos de puta.